jueves, 10 de enero de 2008

Amancio Prada - Adios Rios Adios Fontes





De Rosalia de Castro




Adiós, ríos; adios, fontes;

adios, regatos pequenos;

adios, vista dos meus ollos:

non sei cando nos veremos.

Miña terra, miña terra,

terra donde me eu criei,

hortiña que quero tanto,

figueiriñas que prantei,

prados, ríos, arboredas,

pinares que move o vento,

paxariños piadores,

casiña do meu contento,

muíño dos castañares,

noites craras de luar,

campaniñas trimbadoras,

da igrexiña do lugar,

amoriñas das silveiras

que eu lle daba ó meu amor,

camiñiños antre o millo,

¡adios, para sempre adios!

¡Adios groria! ¡Adios contento!

¡Deixo a casa onde nacín,

deixo a aldea que conozo

por un mundo que non vin!

Deixo amigos por estraños,

deixo a veiga polo mar,

deixo, en fin, canto ben quero...

¡Quen pudera non deixar!...

.........................................

Mais son probe e, ¡mal pecado!,

a miña terra n'é miña,

que hastra lle dan de prestado

a beira por que camiña

ó que naceu desdichado.

Téñovos, pois, que deixar,

hortiña que tanto amei,

fogueiriña do meu lar,

arboriños que prantei,

fontiña do cabañar.

Adios, adios, que me vou,

herbiñas do camposanto,

donde meu pai se enterrou,

herbiñas que biquei tanto,

terriña que nos criou.

Adios Virxe da Asunción,

branca como un serafín;

lévovos no corazón:

Pedídelle a Dios por min,

miña Virxe da Asunción.

Xa se oien lonxe, moi lonxe,

as campanas do Pomar;

para min, ¡ai!, coitadiño,

nunca máis han de tocar.

Xa se oien lonxe, máis lonxe

Cada balada é un dolor;

voume soio, sin arrimo...

¡Miña terra, ¡adios!, ¡adios!

¡Adios tamén, queridiña!...

¡Adios por sempre quizais!...

Dígoche este adios chorando

desde a beiriña do mar.

Non me olvides, queridiña,

si morro de soidás...

tantas légoas mar adentro...

¡Miña casiña!,¡meu lar!




Adiós, ríos; adiós, fuentes.

adiós, riachos pequeños;

adiós, vista de mis ojos;

no sé cuando nos veremos.

Mi tierra, mi tierra,

tierra donde yo me crié,

huertita que quiero tanto,

higueritas que planté,

prados, ríos, arboledas,

pinares que mueve el viento,

pajaritos piadores,

casita de mi contento,

molino de los castañares,

noches claras de luz de luna,

campanitas timbradoras,

de la iglesita del lugar,

moritas de los zarzales

que yo le daba a mi amor,

caminitos entre el maíz,

¡adiós, para siempre adiós!

¡Adiós gloria! ¡Adiós contento!

¡Dejo la casa donde nací,

dejo la aldea que conozco

por un mundo que no ví!

¡Dejo amigos por extraños,

dejo la vega por el mar,

dejo, en fin, cuanto quiero bien…

¡Quien pudiera no dejarlo!…

…………………………….

Pero soy pobre y, ¡mal pecado!

mi tierra no es mía,

que hasta le dan de prestado

la orilla por que camina

al que nació desdichado.

Os tengo, pues, que dejar,

huertita que tanto amé,

hoguerita de mi lar,

arbolitos que planté,

fuentecita del cabañar.

Adiós, adiós, que me voy,

hierbecitas del camposanto,

donde mi padre se enterró,

hierbecitas que besé tanto,

tierrecita que nos crió.

Adiós Virgen de la Asunción,

blanca como un serafín,

os llevo en el corazón:

Pedidle a Dios por mí,

mi Virgen de la Asunción.

Ya se oyen lejos, muy lejos,

las campañas del Pomar,

para mi, ¡ay! desventurado,,

nunca más han de tocar.

Ya se oyen lejos, más lejos

Cada campanada es un dolor;

Me voy solo, sin amparo…

¡Mi tierra, ¡adiós! ¡adiós!

¡Adiós también, queridita!…

¡Adiós por siempre quizás!…

Te digo este adiós llorando

desde la orillita del mar.

No me olvides, queridita,

si muero de soledad…

tantas leguas mar adentro…

¡Mi casita! ¡mi hogar!



veiga: finca de labor, agro.

soidade: saudade, morriña.

4 comentarios:

ybris dijo...

Agradable relax hoy esta esquina.
Gracias.

Conciencia Personal dijo...

Fer:

Cristalina voz, emana sosiego profundo...

Correspondencia total...

Un ramillete de girasoles dejo.

Besitos aztecas...

OTRAMIRADA dijo...

Partir dejando hogar, amores, raices. Bello poema de Rosalia de Castro, cuya obra tuve el placer de conocer. Gracias por compartir

Saludos

ana dijo...

Tanto he amado a la sombra de su voz, de su melodía, de sus palabras prestadas, de su profunda herida, en el cobijo del canto en su garganta prodigiosa, en su mirada limpia como el agua cristalina de las fuentes y los ríos de Rosalía.
Le dediqué un post, con su pema de J.R.de la Cruz, "llama de amor viva"
Precioso Fernando,
un abrazo, encantada de poder estar por áquí de nuevo tras mi gripe y demás.
ana.